El pinsapo o abeto andaluz (Abies pinsapo Boiss.) ha sido considerado desde su descubrimiento como la especie más antigua entre los abetos mediterráneos y como el más elegante. Es una relíquia viviente de los abetales que colonizaron nuestras latitudes.
Es un árbol que puede alcanzar los 30m de altura. Su tronco es recto y de aspecto columnar. Las hojas se disponen perpendiculares sobre las ramas y distribuidas helicoidalmente a lo largo de ellas en forma de cilindro. Las hojas pueden llegar a vivir hasta 15 años, siendo entre las más longevas de todas las coníferas. Las ramas se unen al tronco de forma casi horizontal adquiriendo forma de cruz, por lo que se cortaron en el pasado para su utilización en procesiones y actos religiosos.
En la actualidad, en toda Europa, únicamente crece de forma natural en tres pequeños núcleos de la Serranía de Ronda: Sierra de las Nieves, Sierra de Grazalema y Sierra Bermeja, así como en pequeñas masas de Sierra Canucha y Sierra Cabrilla. Actualmente la mayor parte de los pinsapares se encuentran protegidos por la ley 2/89, de 18 de julio de 1989, por lo que se aprueba el Inventario de los Espacios Naturales de Andalucia y se establecen medidas adicionales para su protección. Como especie, el pinsapo se encuentra protegido por la Ley 8/2003 de 28 de octubre, de la flora y la fauna silvestres, por la que se establece el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas.
Las citas más antiguas del aprovechamiento de madera datan del siglo XVI. Están relacionadas con la construcción naval para la división interior en compartimentos de los buques de la armada que llevó a Felipe II hasta Inglaterra. Además se usó para la obtención de carbón, en la minería y en las actividades relacionadas con los pozos de nieve.
El área que ocupa hoy en día es bastante menor que su área potencial, como consecuencia del acción del hombre y otros impactos negativos. Dichos impactos se han reducido en los últimos años, a la vez que han aumentado las medidas de protección.
Enlace de interés: Abies pinsapo, un Endemismo superviviente del pasado.