La etiolación no es una enfermedad, sino una respuesta de las plantas cuando reciben menos radiación de la que necesitan. ¿Qué síntomas tiene? ¿Perderé mi planta? ¿Es irreversible? ¿Cómo lo soluciono? A continuación daremos respuesta a las anteriores preguntas:
Síntomas
Una planta etiolada perderá su coloración y mostrará un color verde (en el caso de que tuviera colores diferentes al verde). Además, las hojas nuevas que broten, serán de un mayor tamaño y el tallo se alargará, observándose una gran separación entre las hojas. En general se podría decir que la planta presenta un aspecto debilitado, aunque ésto no siempre es algo identificable.
Motivos
Los síntomas anteriormente descritos son simplemente cambios que la planta realiza para poder sobrevivir con poca luz:
- Como hay menos luz, las hojas surgen de un mayor tamaño para poder atrapar más cantidad de fotones de luz.
- El tallo se alarga buscando también una mayor iluminación.
- Los colores tan llamativos de las plantas suculentas son debidos a los pigmentos fotosintéticos (no todos), es decir, pigmentos que reciben la luz y gracias a los cuales realizan la fotosíntesis. Otros pigmentos, normalmente pardos y rojizos, son pigmentos de protección y sirven para reducir la cantidad de radiación que la planta recibe. Dado que no va a utilizar estos pigmentos, la planta ubicada a la sombra solo generará clorofila (que es de color verde).
Consecuencias
Una planta etiolada, a parte de mostar un aspecto menos estético, será más débil y propensa a sufrir diferentes problemas. También se dificultará la floración. Tu planta etiolada no morirá, a no ser que la cantidad de luz que reciba sea tan poca que no sea suficiente para que la planta realice la fotosíntesis.
Habrá periodos en los que las suculentas necesitarán una menor radiación. Es el caso de los cactus clásicos, que en invierno entran en una especie de letargo. De hecho, en general podemos seguir la siguiente regla: mientras más frío haga, menos luz necesitan las plantas.
Solucionar etiolación
Lamentablemente éste es un proceso irreversible, es decir, las partes alargadas seguirán estándolo aunque ubiquemos a la suculenta en un lugar con mayor radiación. Lo único que recuperarán será la coloración. Además, los nuevos brotes crecerán de manera correcta nuevamente Si una planta etiolada, que estaba acostumbrada a la sombra, la ubicamos de repente al sol podemos provocarles quemaduras. Para evitar ésto la iremos acostumbrando poco a poco al sol.
Entonces ¿Mi suculenta siempre tendrá ese aspecto? Claro que no, conforme aparezcan los nuevos brotes que crecerán con una iluminación adecuada y ramifique, su aspecto etiolado se irá disimulando. No obstante, lo más rápido es decapitar la planta, dejar secar el corte y volverla a sembrar.
Las hojas que crecen separadas las retiraremos y podemos colocarlas sobre sustrato húmedo para que enraícen y así reproducir a esta planta. En este vídeo puedes verlo con más detalle. La parte inferior, es decir, la parte con raíces a la que hemos cortado su extremo superior, puede volver a brotar.
En el siguiente vídeo te hablo sobre la iluminación que aporto a mis diferentes crasas. También veremos al final del vídeo cómo reparar una etiolación: